LA SOMBRA

¿Qué es la sombra?

La sombra, concepto psicológico definido por Carl Gustav Jung (mayor exponente de la psicología transpersonal) es el componente de la psique humana más misterioso, incómodo y útil para tu crecimiento personal.

Cuando naces, aún no has sido programado de ninguna manera, más allá de lo que traes en tu combinación genética. Lo único que tienes es tu autenticidad y tu forma natural e instintiva de actuar. De acuerdo a la sociedad y a la familia en la que coexistes, muchas veces esas formas naturales e instintivas de actuar no son recibidas de la mejor manera por el mundo exterior. Te comportas de cierta manera natural y auténtica, y a cambio recibes rechazo, desaprobación, abandono o burla. Sientes humillación, sientes dolor, sientes ira o sientes vergüenza. Tu psiquis es tan inteligente que siempre intenta evitar el dolor futuro. Rápidamente atrapa las claves de que esa característica tuya no es aceptable y de que te causará problemas más adelante. Tu subconsciente crea un compartimiento especial en donde guarda con especial cuidado esta característica. Pasa a ser parte de tu sombra.

En el futuro, harás maniobras para evitar demostrar esta característica. Cada vez que alguien mencione o destaque tu sombra de cualquier manera (¡puede ser mínima!) te surgirán emociones muy intensas al respecto… todas aquellas que viviste en la infancia cuando fuiste humillada por tu sombra. También, cuando veas a alguien más que personifique esta sombra, te sentirás muy incómoda, enojada o crítica al respecto.

Veamos un ejemplo.

María tenía 5 años cuando empezó a experimentar con su fascinación escénica. Le ilusionaba, le motivaba y le movía el piso la idea de crear un show y presentarlo frente a su familia. Pasaba horas en su cuarto practicando con sus peluches y muñecas su momento de estrellato. Cuando estuvo lista, salió y le dijo a su mamá que tenía un show para presentarles. Su mamá, estaba ese momento ocupada y le dijo que no le interrumpa. María se sintió algo desplazada, pero entendió. Luego, cuando su papá llegó a la casa, María les propuso a ambos presentarles un show. Su papá, muy molesto y cansado, le dijo que no tenía tiempo para esas tonterías. María se puso muy triste y se fue a llorar a su habitación. María estaba ya algo insegura de lo que quería hacer, sentía un poco de temor y de vergüenza con esto, pero trató una vez más. Cuando llegaron invitados a la casa, María salió a la sala con su disfraz e inició su show. Su papá regresó a ver amenazantemente a su mamá, quién cogió a María de la mano y la llevó a su cuarto. Le explicó que debe respetar el espacio de los adultos y que no está bien llamar la atención de esa manera. Que la sala no es lugar para jugar, y que si quiere participar de la reunión tiene que comportarse adecuadamente, es decir, como adulto.

María se sintió muy tonta y humillada. De ahí en adelante tenía mucho miedo de llamar la atención frente a sus papás, porque entendía que eso no estaba bien. Sus papás siguieron dándole claves de que lo correcto es comportarse como adulto y no salirse de la raya, en especial cuando los adultos están hablando de cosas importantes o cansados porque vienen de trabajos importantes.

Para María, los comportamientos “infantiles” y ser el “centro de atención” pasaron a ser parte de su sombra. De allí aprendió a reprimir sus ganas de fascinar a un público y animar a la gente con cosas triviales mas no “importantes”. Se volvió una adulta muy medida y reprimida en cuanto a la diversión. Le costaba soltarse, le costaba salir del esquema de que lo más importante es el mundo serio. Cada vez que veía a otra chica haciendo el show o llamando la intención, la criticaba y la juzgaba como superficial. También, sentía mucho dolor e ira cuando a ella la criticaban como cohibida, reprimida o seria, ya que son características que destaca el daño colateral de su sombra.

Su ser autentico tiene sed de animar, de hablar en público, de estar en escenarios. María tiene que destapar sus heridas, ver el dolor y humillación que sintió, perdonar, dar a su niña interior la aprobación y apoyo que le faltó en ese momento. Integrar su sombra le ayudará a tener paz interior y centellear.

*Ojo: la sombra puede formarse con eventos que resultaron para ti muy dolorosos, o puede componerse con comentarios/burlas que fuiste recibiendo en dosis pequeñas pero frecuentes. La clave para descubrir qué compone tu sombra es ver cuáles críticas son las que más te detonan emociones negativas. También puedes observar a alguien que te incomode/moleste mucho. Podría estar reflejando tu sombra.