TÚ ERES 100% RESPONSABLE DEL ASUNTO. NO HAY VÍCTIMAS Y NO HAY CULPABLES

blogpost Mar 09, 2021

¿Por qué siempre nos ponemos a la defensiva cuando discutimos y no podemos hablar con calma? ¿Por qué me siguen pasando cosas "malas" y por qué todo me pasa a mí?

 

En todas estas situaciones, estás percibiendo la situación desde tus propias creencias limitantes y hay un error en la forma en la que te estás comunicando. No te sientas mal,

cuando estamos heridos o frustrados, tendemos a atacar al otro por su “falta": ¡es una forma de protegernos! (O de obtener lo que necesitamos).

 

En esa manera de comunicarte, significa que tú eres la víctima de lo que está sucediendo, y el otro es el agresor o el culpable. Si eres víctima de una situación, hay poco que puedes hacer, y tu vida difícilmente va a cambiar – seguirán apareciendo más y más agresores y culpables que te pondrán en posiciones de víctima. Estarás constantemente perpetuando tu arquetipo o esquema mental de víctima.

 

EN REALIDAD, no hay culpables y no hay víctimas. En ninguna situación. Solo hay filtros con los que percibes la información.

 

Tú eres 100% responsable de todo el asunto en el que estás, así como la contraparte es 100% responsable del asunto (y todos los demás involucrados: cada uno 100% responsable de su pedazo de torta).

 

Tú atraes las situaciones (o filtras cognitivamente la información) que sigue reafirmando tus propios esquemas y creencias de relacionamiento.

 

Solo cuando te das cuenta que eres 100% responsable de tu realidad, puedes tomar el timón de tu vida y hacer el giro que tanto quieres. Solo tú tienes el poder de cambiar tu filtro mental y salir del patrón que te disgusta.

 

Entonces, tomando en cuenta que el primer paso es asumir internamente el 100% de la responsabilidad de lo que está ocurriendo, observemos dos caminos de reprogramación:

 

1. ¿Qué me causa esta situación?

 

- Observa emociones, pensamientos y comportamientos.

- ¿En qué otra situación de mi vida he tenido emociones, pensamientos o comportamientos similares?

- ¿Qué ganancia obtengo con estas emociones, pensamientos o comportamientos? Haz el esfuerzo de encontrar la ganancia secundaria detrás. Cuando tus esquemas mentales se formaron, tu psiquis aprendió que esta es la mejor manera para sentirte, pensar o comportarte de cierta manera. Posiblemente lo sigues repitiendo.

- Si no ves las ganancias del presente, recuerda en el momento en que este patrón se formó (infancia o adolescencia), y qué ganancias te traía.

 

2. ¿Qué dinámica se está presentando en esta situación?

 

- Observa tu rol, el rol del otro y la interacción entre ambos.

- ¿En qué otra situación de mi vida he tenido una dinámica similar?

- ¿Qué ganancia obtengo con esta dinámica? Haz el esfuerzo de encontrar la ganancia secundaria detrás. Cuando tus esquemas se formaron, tu psiquis aprendió que esta dinámica te beneficiaba de cierta manera - te hacía sentir querida, vista, atendida, aprobada, exitosa, entre otros. Posiblemente sigues repitiendo esta dinámica para obtener esa misma ganancia.

- Si no ves las ganancias del presente, recuerda en el momento en que este patrón se formó (infancia o adolescencia), y qué ganancias te traía.

 

Ahora.

 

YA NO NECESITAS de ese patrón dañino para obtener lo que necesitas y mereces. Ahora tu cerebro está mucho más desarrollado y puedes ver que existen otras formas de obtener lo que necesitas. Es momento de crear un nuevo circuito cerebral, que nace desde la libertad y no desde la carencia.

 

Realiza la siguiente reflexión

 

1. Comprende que en su momento fue válido que tú hayas funcionado de esta manera, ya que ese niño no tenía otra opción. Comprende que hizo lo mejor que pudo con la situación en frente.

2. Siente compasión y ternura por tu niño interior. Dale lo que necesita.

3. Visualiza, como el adulto libre que eres, otras opciones que existen para comunicarte con el mundo y con los demás.

4. Reprograma tu creencia limitante, creando una frase o mantra que reafirme cómo te quieres presentar ahora en esta situación.

 

En cuanto a discusiones personales

 

Ten en cuenta que la otra persona también está jugando desde su 100% de responsabilidad y replicando sus propios patrones. Si es que siempre hay conflicto entre ustedes, significa que calzan perfectamente en sus carencias: tú proyectas sus creencias limitantes y él las tuyas. Ese "calzar" crea una dependencia subconsciente entre ustedes, en la cual siguen perpetuando la misma dinámica una y otra vez.

 

En lugar de enredarte en la dinámica, ahora puedes practicar esta ecuación SÚPER EFECTIVA para comunicarte dentro de un conflicto personal:

Por ejemplo:

 

1. (Entiendo que estás enojado porque llegué tan tarde y que eso te frustra) + (pero) + (disfruto el tiempo con mis compañeros de trabajo y es una necesidad mía para recargarme. Por favor entiende que la hora en la que llego no cambia mi amor por ti).

En este caso la ganancia secundaria puede haber sido sentirse importante y deseada por su pareja cuando él le reclama a gritos la hora de llegada.

 

2. (Gracias por proponerme cómo hacer este trabajo, entiendo que te interesa ayudarme y que las cosas se hagan más rápido) + (pero) + (estoy intentando aprenderlo y hacerlo de manera independiente esta vez).

En este caso la ganancia secundaria puede haber sido obtener la compañía y el apoyo de su compañero o jefe de trabajo, y desde ese rol de inútil o víctima, logra nunca quedarse solo.

 

3. (Entiendo que quieres compartir más tiempo conmigo y te sientes rechazado cuando te alejo) + (pero) + (el tiempo personal es muy importante para mí y para mi bienestar. Te propongo que me des un tiempo a solas y después compartimos juntos).

En este caso la ganancia secundaria puede haber sido el pertenecer, sentirse necesitada, válida, útil.

 

4. (Entiendo que quieres que las cosas estén arregladas o en su lugar y entiendo que el orden es muy importante para ti) + (pero) + (ahora voy a enfocarme en trabajar y cuando acabe arreglaré).

En este caso la ganancia secundaria puede haber sido la atención de su mamá, el sentir que pertenece a esa familia. Obtener más atención que sus hermanos.

 

5. (Entiendo que quieres lo mejor para mí y que no estás de acuerdo en cómo hago las cosas) + (pero) + (en esta situación, quiero tratar de hacerlo de esta manera y ver si resulta). En este caso la ganancia secundaria puede haber sido sentirse visto, sentirse amado.