TUS PENSAMIENTOS NEGATIVOS SON EL HILO POR DONDE JALAR - ¡NO LOS HUYAS!

blogpost Mar 09, 2021

 

Frecuentemente, mis pacientes me dicen que tienen pensamientos negativos que les invaden y les causan mucha ansiedad, angustia y miedo. Ahora te voy a explicar algo.

 

  • Los pensamientos automáticos nacen de tus creencias o esquemas centrales (que se formaron en tu infancia). Por ende, los pensamientos negativos te hablan acerca de tus creencias erradas o no sanadas.

  • ¡Encontraste el hilo de dónde jalar! Más abajo haremos un ejercicio poderoso. Pero antes, importante recalcar:

  • Tú no eres tus pensamientos. Tus pensamientos no te definen. Tus pensamientos pueden causar emociones negativas, porque el cerebro prefrontal (pensamientos) está conectado con el cerebro medio (emociones). Pero tus pensamientos no controlan tus acciones, tus decisiones ni tu identidad.

  • Para ganar perspectiva y que “ellos” no te controlen, mira a tus pensamientos como un agente externo, sepárate de ellos, visualízalos como si fueran una bola de lana en frente tuyo.

  • No les tengas miedo a tus pensamientos. Ellos son aliados que te traen una perfecta oportunidad de crecimiento y expansión. Los pensamientos negativos señalan el camino de tus miedos y, por ende, tu zona de crecimiento.

 

Practica la siguiente secuencia:

 

1. Observa:

 

a. Los pensamientos, ¿qué me están diciendo?

 

b. ¿Qué miedo hay detrás? – trata de cernir el miedo primordial que hay detrás de tus

pensamientos:

- Miedo a ser rechazada, miedo a que no me aprueben

- Miedo a fracasar o que me vaya mal

- Miedo a no pertenecer, miedo a estar sola

- Miedo a estar en peligro

- Miedo a sentir dolor, miedo a que me hagan daño

- Etc.

 

c. Regresa en el tiempo y conéctate con tu niño interior: este miedo, ¿de dónde viene?, ¿cuándo antes en mi vida lo he sentido?

 

d. ¿Por qué sentí este miedo en el pasado? Recuerda la experiencia.

 

2. Comprende y perdona:

 

a. Comprende que en ese momento de tu infancia/adolescencia, el miedo era válido y hubo una razón por la cual se formó.

 

b. Dale a tu niño interior lo que necesita en este momento – lo opuesto a la razón por la cual se formó la creencia de miedo:

- Aprobación, aceptación

- Competencia, aliento, motivación para intentar, aceptación si fracasa

- Pertenencia, compañía, apoyo

- Seguridad, confianza

- Protección, recursos

- Etc.

 

c. Tómate unos minutos para transmitir esta nueva sensación a ese niño.

 

d. Ahora, transmite compasión a tu parte adulta por tener pensamientos negativos.

 

e. Entiende que en el pasado has sufrido, pero que ahora estás segura y lista para reprogramar ese esquema.

 

f. Mira como ahora tienes más herramientas que de pequeña, y ese miedo ya no representa una amenaza real.

 

g. Repite: “entiendo que este miedo fue válido en el pasado, pero ahora este pensamiento no es real; ahora estoy segura”.

 

3. Escoge:

 

a. Un nuevo pensamiento que puede reemplazar al negativo.

 

b. Trata de reenfocar el tema del pensamiento negativo hacia algo positivo.

 

c. Crea un mantra con la nueva creencia. Repítelo cuantas veces quieras.

 

Aquí te dejo una meditación guiada con el mismo ejercicio. Para muchas personas es más poderoso y eficiente hacer el ejercicio de esta manera.